AÑO DEL CENTENARIO RFEN

El 19 de abril de 1920 unos entusiastas de los deportes acuáticos en nombre de tres clubes históricos constituyeron la Federación Española de Natación Amateur… Largo tiempo ha pasado: ¡100 años!

Todo estaba preparado para que este 2020 se viera impregnado de la efeméride: los Campeonatos en clave centenaria, actos festivos, Gala especial…

AÑO DEL COVID

El 14 de marzo de 2020, el Gobierno de España decretó el estado de alarma.
A partir de ahí… tremenda paradoja. ¡El año de nuestro Centenario se ha convertido en el año del COVID!

Las reflexiones que habitualmente se acometen en una efeméride de estas características nos llevarían a evaluar y proyectar: de dónde venimos, dónde estamos, a dónde vamos.
El escenario ha cambiado… y nos ha cambiado. Todos estamos a la expectativa de lo que acontece y esperanzados de que las incertidumbres se desvanezcan para poder planificar. ¿Planificar? Pues sí.

Este año, el protagonismo que presumíamos iba a tener nuestro Centenario RFEN se ha transformado, sin nuestro consentimiento, en el año del COVID y las consecuencias tan negativas que está produciendo y que  ha producido.

La sociedad, en toda su extensión, sufre las consecuencias de la pandemia. El deporte como parte esencial de esta sociedad también las padece, tanto en la práctica como las estructuras que soportan esa práctica.

La industria del deporte en un sentido amplio se ve negativamente afectada. El cierre de instalaciones y, posteriormente, el acceso limitado a las mismas produce un quebranto enorme. El estudio elaborado por ADESP y la Fundación España Activa de la primera ola de la pandemia estimaban el menoscabo económico en torno al 38% lo que supone una cifra de pérdidas de más de 4 millones de €. Y esto afecta en mayor o menor medida a todos los agentes que estamos integrados en el sistema. Nos hallamos pendientes de valuar todavía las consecuencias de esta segunda ola en la que estamos inmersos. Por tanto podemos decir, o por lo menos yo digo, que desde el 14 de marzo no hemos recuperado la normalidad.

EL DEPORTE FEDERADO

Las estructuras que soportan el deporte federado son básicamente los clubes, las Federaciones autonómicas y las Federaciones Españolas. Con los datos del citado artículo, los clubes han sido los más afectados y en menor escala, pero también relevante, las Federaciones Autonómicas y Españolas. Si la crisis del 2008 se llevó por delante miles de clubes, habremos de estar expectantes a las consecuencias de esta. Por extensión, habrá que estar también atentos a la capacidad de respuesta de las empresas que gestionan servicios deportivos.

Pese al valor que se le da a la actividad física y deportiva por nuestras autoridades políticas, lo cierto es que el sector deportivo, federado y no federado, no se ha visto adecuadamente tratado durante la pandemia por todas las medidas adoptadas en las instalaciones deportivas, las gestione quien las gestiones: clubes, empresas, patronatos.

LA RESPUESTA

Parafraseando a John F. Kennedy, de toda crisis surgen oportunidades. Y éstas han de buscarse, no aparecen solas pero existen. La sociedad necesariamente ha cambiado. Muchos de esos cambio han venido para quedarse y otros están por descubrir.

Las alianzas. Resulta llamativo y esperanzador que el deporte federado y el no federado han visto la necesidad de complementarse y apoyarse ya que en el fundamento de sus objetivos está el individuo, la persona y la conveniencia de la actividad física. Quienes operamos en el sector debemos de defenderlo y unos se inclinarán hacia la actividad federada-competitiva y otros hacia la lúdica, salud, recuperación… Todos tenemos nuestro espacio, pero todos cabemos y nos complementamos. Sirva de ejemplo la alianza de la RFEN que presido con FAGDE. Y en mucha mayor escala la alianza entre ADESP (Asociación que aglutina a todas las Federaciones Españolas) y la Fundación España Activa. El mundo federado y no federado defiende, protege y se desarrolla en torno a lo que nos une: la actividad física y la práctica deportiva.

La innovación. La búsqueda de soluciones y de alternativas nos ha llevado a desarrollar aspectos en los que probablemente ya estábamos inmersos pero que se han acelerado. Resulta clave por tanto la utilización de recursos existentes en otros sectores pero que se pueden adaptar a nuestro mundo. Por otro lado, también está la investigación para crear herramientas específicas.

Medidas legislativas. Recientemente el Congreso de los Diputados acordó declarar el deporte como actividad de interés general. Esta declaración acordada casi por unanimidad es un buen punto de partida para abordar cuestiones enquistadas pero necesarias: el tratamiento del IVA a la actividad física y deportiva, beneficios fiscales para quienes invierten en deporte, difusión de los valores del deporte …

Medidas económicas paliativas. Apuntaba antes el quebranto económico ya sufrido por sector deportivo en la primera oleada de la pandemia. Pendientes todavía de lo que puede suponer la que estamos en este momento sufriendo. Pero es de notoria importancia la declaración pública del Presidente del Gobierno al explicar el Plan de Reconstrucción Nacional con Fondos europeos en la que citó como una de las palancas el deporte.

Todos los que estamos inmersos en el complejo mundo deportivo precisamos remedios a corto plazo pero nuestro reto es el medio y el largo. De esta crisis surgirán nuevos modelos que nos tendrán que poner en la línea de actuación de los próximos veinte años. Es nuestro reto, es nuestro objetivo.