Deporte y emergencia climática: la carrera ha comenzado
12/09/2022 ARTÍCULOS
AUTOR: Diego Ávarez - Servicio de Actividades Deportivas de la Universidad de Zaragoza · Colaborador del Proyecto Zaragoza Deporte Sostenible
”Debemos salvar y mejorar la tierra donde vivimos. Estamos en una carrera donde cada minuto cuenta, como en una maratón". Así de firme se muestra Eliud Kipchoge, recordman mundial de maratón, en su defensa del medioambiente y en la lucha contra el cambio climático.
Todos somos conscientes de que el clima está cambiando de forma incontrolada. El planeta se calienta tan rápido que se ha modificado incluso la terminología, hemos pasado de la denominación cambio climático a crisis climática y –últimamente- a emergencia climática. Toda la comunidad científica alerta de que debemos actuar ya y piden la colaboración de todos los sectores. Ante esta urgencia, ¿desde el ámbito deportivo podemos hacer algo? ¿Puede el deporte ser el gran aliado del planeta?
En general, el mundo del deporte está preocupado y sensibilizado por el medioambiente. Así lo demuestra la encuesta de 2021, en la que se plasmaba que “ …el 77,4% de los atletas encuestados de 89 países se muestran muy preocupados por la emergencia climática”. Ha llegado el momento de encauzar este creciente interés y ofrecer herramientas a las entidades deportivas para que puedan diseñar infraestructuras y organizar eventos con criterios de sostenibilidad.
1. Temas clave sobre deporte y sostenibilidad ambiental
Para comenzar a profundizar sobre el tema, e intentar que nuestras entidades o eventos tengan la menor huella ambiental, deberíamos tener en cuenta estos breves tips o evidencias sobre sostenibilidad y deporte.
• El clima está cambiando drásticamente.
El clima es dinámico, siempre cambia, pero actualmente existe consenso científico de que el cambio es muy rápido, debido a la actividad humana y con consecuencias imprevisibles. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) señaló que los últimos seis años, fueron los seis más cálidos registrados hasta la fecha. La evolución no es favorable.
• La crisis climática afecta a la práctica deportiva.
Altas temperaturas, incendios, huracanes, inundaciones… el nuevo clima extremo afecta a muchas disciplinas deportivas (especialmente a los deportes al aire libre). Ya estamos notando las consecuencias en la falta de nieve que afecta a muchas estaciones de esquí o en las altas temperaturas soportadas por los deportistas en eventos como el Open de Australia de tenis.
• El deporte puede tener un alto impacto ambiental.
Aunque la mayoría de los eventos deportivos han implantado criterios de sostenibilidad ambiental, todavía podemos mejorar en muchos aspectos: construcción sostenible de instalaciones deportivas, huella de carbono, residuos… A modo de ejemplo indicar, que los juegos Olímpicos de Pekín 2008 generaron una huella de carbono de aprox. 3,5 Tn de CO2. Como buena noticia, apuntar que los Juegos Olímpicos de París 2024 pretenden ser los primeros que tendrán una contribución positiva al clima. Se va a realizar un gran esfuerzo, por lo que se reducirán las emisiones a 1,5 Tn y se impulsará la compensación del resto de emisiones en el proyecto de la Gran Muralla Verde del Sahara y el Sahel.
• El mundo del deporte se está implicando.
Como estamos viendo, cada vez hay más entidades y deportistas implicados con el medio ambiente. Grandes eventos internacionales como la Maratón de Londres disponen de ambiciosos planes de sostenibilidad. En el ámbito nacional, eventos como La Vuelta y la Maratón de Valencia, o clubes como el Real Betis Balompié han tomado conciencia y realizan acciones para promover y divulgar la sostenibilidad.
• Ser sostenible para planificar mejor.
Organizar un evento sostenible conlleva un proceso de análisis y planificación, que incluso puede reducir los costes derivados de la organización del evento (equipamientos, energía…). Así, gracias a la implantación de su plan de sostenibilidad, la Barcelona World Race consiguió reducir en un 15% sus costes de energía.
• Nuevas herramientas web a disposición de clubes y entidades para mejorar en sostenibilidad.
A la vista de que entidades, organizadores de eventos y deportistas quieren promover la sostenibilidad, están surgiendo plataformas y herramientas que ayudan a las entidades a ser más sostenibles.
A nivel internacional cabe destacar la plataforma Sport for Climate Action que ha lanzado Naciones Unidas y a la que se han adherido clubes, federaciones y universidades de todo el planeta. También encontramos la Outdoor Friendly Pledge (abanderada por el deportista Kilian Jornet) o la clasificación de sostenibilidad de la Premier League (el Liverpool consiguió la mayor puntuación en sostenibilidad en la Premier 2021/22).
A nivel nacional resaltamos los proyectos del Comité Olímpico Español y el proyecto de ciudad de Zaragoza Deporte Sostenible, una plataforma que está consiguiendo implicar a numerosas entidades deportivas de la capital aragonesa.
• El deporte tiene un alto poder para transmitir ideas.
El deporte puede ser uno de los mejores medios para abanderar la lucha por el clima. Los deportistas experimentan los efectos del cambio climático, están concienciados con el cuidado del medioambiente y sobre todo tienen la capacidad de influir en millones de espectadores y en la opinión pública. Muchos deportistas profesionales como Héctor Bellerín (@HectorBellerin) o Yulimar Rojas (@TeamRojas45) ya se han posicionado activamente en la lucha contra el cambio climático y están intentando transmitir este mensaje entre los aficionados.
Existen además, ejemplos de organizaciones como EcoAtlethes que aglutinan a deportistas de todo el mundo y cuyo objetivo principal es “…concienciar sobre la crisis climática entre millones de fans y espectadores.” Para que el deporte pueda canalizar estas ideas es imprescindible la colaboración de medios de comunicación y la capacidad de difusión a través de redes sociales.
• Hay que actuar ya.
Estamos en una carrera contra el cambio climático. Aunque hace unos años pensábamos que se trataba de una carrera de larga distancia, la evidencia científica nos dice que el calentamiento del planeta se ha acelerado y nuestros esfuerzos tienen que ser mayores y actuar ya. Estamos ante una carrera de velocidad por salvar el planeta. Hay muchas entidades que son conscientes de esta urgencia como la Federación Internacional de Atletismo que se ha planteado la meta de ser carbono neutral en 2030, fecha que la comunidad científica apunta como límite para reducir drásticamente nuestra huella de carbono.
2. ¿Qué tener en cuenta para que nuestra actividad deportiva sea sostenible?
Si estamos concienciados del reto que supone la emergencia climática, es momento de pasar a la acción. ¿Qué podemos hacer para que nuestra actividad deportiva sea más sostenible?. Nos centraremos en el caso práctico de organizar un evento deportivo. Si queremos que nuestro evento sea sostenible, como en cualquier proceso deberemos elaborar una buena planificación. Diagnosticar bien, definir el plan de acción y sobre todo medir, medir y medir para mejorar. Es trascendental trabajar con datos e indicadores objetivos.
Además, es transcendental para que nuestro plan de sostenibilidad tenga éxito, la participación de todos los agentes del evento: organización, participantes, voluntarios, proveedores y espectadores. Es importante propiciar la participación y la gobernanza compartida.
Pero, ¿sobre qué áreas de nuestro evento debemos actuar? Para que un evento o entidad sea sostenible, principalmente deberemos tener en cuenta estas 10 áreas: entorno natural, movilidad, energía, agua, proveedores, equipamientos, ruido, residuos, emisiones de CO2 y comunicación.
Aunque todas las áreas son importantes, los especialistas en la materia (p.e. Sport for Climate Action) recomiendan fortalecer las acciones relativas a emisiones de CO2 (intentar que la huella de carbono tienda a cero lo antes posible / Carbono Neutral), residuos (es importante no centrarnos únicamente en reciclaje, es mucho más efectivo reducir la adquisición de productos / Zero Waste) y comunicación (implicar a medios, proveedores, deportistas y espectadores)
Aun así, no debemos olvidar el resto de acciones como son respetar el medio natural, reducir consumos energéticos, disminuir la contaminación acústica o disponer de un plan de compra sostenible, para que nuestro evento sea sostenible.
3. A modo de conclusión
La ONU advierte que las emisiones deben reducirse a la mitad en 2030 para evitar una catástrofe: "Es ahora o nunca". Como deportistas y como gestores de entidades deportivas tenemos la obligación moral de ponernos manos a la obra. El deporte hasta ahora ha ayudado a mejorar la salud de las personas, ahora nos toca liderar el gran reto de mejorar la salud del planeta. La carrera ha comenzado.